DOCE, CON CINCO OROS, EN EL ABSOLUTO EN PISTA CUBIERTA, EN MADRID.
La salud del atletismo de Castilla y León estaba a prueba en un intenso fin de semana, con dos Campeonatos de España, y nuestra Comunidad ha demostrado que no en balde es la actual Campeona de España por selecciones autonómicas absolutas, título que logró el pasado septiembre, en Ciudad Real.
En la fantástica y rápida pista cubierta de Gallur se disputaba en Campeonato de España absoluto que tenía el interés añadido de dar pasaportes para el Europeo de Polonia, dentro de dos semanas.
De las seis medallas del año pasado, en Orense, se han pasado a las doce de Gallur, donde los consagrados han confirmado su buen estado de forma y donde varias jóvenes han demostrado que el futuro está asegurado. Otro apunte destacado es que los doce medallistas son nacidos en y formados en Castilla y León.
Un corajudo Oscar Husillos derrochó clase y fuerza en los 400, donde el palentino hizo 46.55, en 800, el renacido Álvaro de Arriba era oro en 800, con 1.47.91, prueba en la que el salmantino tomó la cabeza desde el primer metro, tres medallas en los 1500, oro para el burgalés Jesus Gomez, que superó tropiezos y caídas habidas en la carrera, para ganar de calle, con 3.49.32, la soriana Marta Pérez, era plata, con 4.09.44, tras superar hace escasos días la COVID, con el bronce para una jovencísima segoviana, Águeda Muñoz, con 4.14.18, en los 3000, una palentina que derrochó inteligencia en carrera, Marta García, daba la sorpresa y se hacía con el título de Campeona de España, con 9.14.76, bien secundada por la leonesa Blanca Fernandez, plata, con 9.15.31 y cerraba la lista de oros el soriano Mario Arancón, (Numantino) en el heptatlón, con 5.508 puntos, regular en los dos días de dura competición.
Otras platas obtenían la abulense Andrea Jimenez, en los 400 , con 53.66, una impresionante marca para una atleta de poco más de diecinueve años y eran bronces dos jóvenes de oro, la leonesa Mónica Borraz, en peso, con 14,92 y Maria Cisneros (Universidad de León), en 60 lisos, que con 7.41 borraba de la tabla de récords absolutos de Castilla y León a Arantxa Iglesias, 7.42, una plusmarca que databa de 1999, y un último bronce lograba en Gallur la toresana de Las Celtíberas Raquel Álvarez, en altura, con 1,74, que así celebraba haber sido mamá hace siete meses.
