LAS MINISANSILVESTRES, ILUSION Y DEPORTE EN ESTADO PURO

Que mejor preámbulo para una gran San Silvestre Popular de Valladolid que ver a cientos de niños compitiendo en las Minisansilvestres, que año tras año siguen creciendo en participación e interés.

La numerosa participación (rozando los cien inscritos en alguna categoría) hizo que fuera preciso desdoblar varias de esas categorías en dos carreras, según el año de nacimiento, pero todo trascurrió a plena satisfacción, sobre todo, de los padres que abarrotaban la zona de salida y meta.

Especial mención hay que hacer a los voluntarios de Oxfam Intermón, que se encargaron de llevar a los niños al lugar de salida, de devolverles a sus padres, de consolar a los que habían tenido alguna incidencia, y de ayudar a los más pequeños a acabar el recorrido, siempre con una sonrisa y con una eficacia absoluta.

También elogiar la labor de los voluntarios de la Federación, encargados de reducir el circuito según iba disminuyendo la edad de los “miniatletas”, para acabar en la pequeña pista de los chupetines, que mayor atención acapararon de los espectadores.

En la meta, todos recibieron su bolsa del corredor, (ya habían recibido otra al retirar su dorsal, con la camiseta, gorro de Navidad, Caldo Aneto…) con una botella de agua, una naranja y un estuche que contenía un set de dibujo que recordaría tiempos pasados a los padres, ya que tenía un compás, escuadra, cartabón, regla, goma de borrar…
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LOS PEQUES DE LA COMPETICIÓN